Esfera selenita naranja

Selenita Naranja – Calma Profunda y Estabilidad Emocional

La selenita naranja es una de las variantes más especiales del yeso cristalizado (sulfato de calcio hidratado). Su color cálido y suave proviene de la presencia natural de óxidos o inclusiones de hierro, que aportan una energía complementaria a la ya conocida vibración de la selenita blanca. Esta piedra se forma en entornos sedimentarios, en condiciones de evaporación lenta, lo que refuerza su cualidad energética: la capacidad de decantar, calmar y purificar de forma continua.

 En el ámbito energético, la selenita naranja destaca por su efecto estabilizador sobre el sistema emocional, especialmente útil en momentos de agitación, exceso mental o ansiedad persistente. Es una piedra que invita al cuerpo a detenerse, al corazón a ralentizar su ritmo, y a la mente a recuperar claridad. Actúa como un bálsamo sutil que disuelve cargas emocionales innecesarias y favorece la presencia tranquila en el aquí y ahora.

A diferencia de la selenita blanca, cuya acción es más elevada y etérea, la selenita naranja trabaja desde un plano más terrenal y corporal. Su frecuencia resuena con el segundo chakra (Svadhisthana), el centro energético vinculado con las emociones, los vínculos afectivos, la creatividad y el equilibrio entre placer y responsabilidad. Gracias a esta conexión, la selenita naranja puede ser de gran ayuda para quienes sienten que han perdido el control emocional, que viven con sobresaturación sensorial o que necesitan reconectar con su centro sin desconectarse del mundo.

Ideal para colocar en espacios íntimos, terapéuticos o de descanso, o para acompañar prácticas de meditación y respiración, la selenita naranja no solo armoniza: contiene, alivia y estabiliza. Es especialmente recomendada en momentos de estrés sostenido, cambios intensos o cuando se requiere reforzar el autocuidado sin aislarse del entorno.

Más que una piedra decorativa, la selenita naranja es una herramienta de equilibrio que nos recuerda la importancia de habitar el cuerpo con suavidad, sentir sin abrumarse, y construir espacios internos donde la calma no sea la excepción, sino la base.

¿Cómo usar una esfera de selenita naranja?

Colócala en el centro de una habitación o en un lugar estratégico (como una esquina energética densa o estancada).

La esfera irradiará su vibración de forma uniforme, purificando el ambiente y elevando su energía. Sujétala con ambas manos durante la meditación. Te ayudará a calmar la mente, conectar con tu interior y elevar tus pensamientos hacia planos más elevados. Su energía cálida también facilita una conexión amorosa con tus guías espirituales.

Ideal para sesiones de Reiki, terapias energéticas o masajes. Puedes colocarla cerca del cuerpo, en el chakra sacro o el plexo solar, para equilibrar emociones, desbloquear energías y aportar estabilidad.  colócala En tu altar o rincón sagrado

Una esfera tan grande y potente es perfecta como pieza central de un altar. Potencia cualquier intención que proyectes, ya sea protección, sanación o claridad espiritual.

Elemento decorativo de alto impacto energético

Más allá de lo espiritual, su belleza natural aporta una estética única a cualquier espacio, llenándolo de luz, calidez y armonía.

Procedencia: Marruecos

Tamaño aproximad:

esfera grande: 23 cm de circunferencia

esfera pequeña: 11 cm de circunferencia

incluye pequeña peana de madera